Sabían desde hace días que este "amor" duraría una semana y por eso lo exprimieron al máximo.
Julio Julianoti y Gonzalo Alfonso se llevaron el Master de Saltillo con autoridad ante los líderes del ranking APT Padel Tour,
Maxi Arce y Franco Dal Bianco (2/6 6/3 6/3).
Vení, vidi, vici... la fórmula atribuida a Julio César calza a la perfección con lo que han logrado el brasileño y el argentino. Vinieron, vieron y ganaron el penúltimo Master de la temporada, el primer título del año para ambos.
No era una tarea fácil la que tenían por delante. Estaba enfrente la pareja más regular del circuito, la que lidera la clasificación, los "relojitos" Dal Bianco y Arce. Y así lo sufrieron en el primer set, inmaculado de los números 1. Franco estuvo muy acertado con el remate, cometieron pocos errores y no tuvieron fisuras en defensa. Rompieron en el segundo juego el saque de Julianoti, ganaban en la red los duelos de volea y un nuevo break en el octavo juego al servicio de Alfonso les dio la ventaja en el primer acto por 6/2.
El segundo set comenzó muy igualado, hasta ese séptimo juego que cambió el rumbo del partido. Alfonso comenzó a descargar con gritos su rabia, fue como un despertar. Con el 3/3 en el marcador, lograron romper el saque de Dal Bianco y desde ese momento comenzó el monólogo del brasileño y el argentino.
Consiguieron un parcial de 6-0. Cerraron el segundo set 6/3 y se pusieron 3/0 en el tercero tras romper el saque de Arce. No tenían nada que perder, se estaban divirtiendo y todo lo conseguido ya era mucho para ellos.
Los líderes de la clasificación desperdiciaron sus dos últimas “balas” en el séptimo juego. Estuvieron 30-40 con el servicio de Alfonso. Las dos voleas de Dal Bianco se estrellaron en la red y fue la sentencia. Tuvieron los campeones una bola de partido al resto en el octavo juego, pero acabaron cerrando la final con el saque del brasileño en el noveno.
Primer título para Julianoti y Alfonso en la temporada. Un “matrimonio” fugaz que tras el Master de Saltillo se disuelve, pero quien sabe si como decía Joaquín Sabina: “nos dijimos adiós... ojalá que volvamos a vernos”.